La Comisión propone permitir cancerígenos en cosméticos

cosméticos

La Comisión permitirá cancerígenos conocidos en cosméticos y productos de cuidado personal como enjuague bucal y pasta de dientes, si no lo evitamos.

Simplificación tóxica

La Dirección General de Mercado Interior, Industria, Emprendimiento y Pymes (DG GROW) de la Comisión Europea ha realizado un taller sobre la posible simplificación de la legislación sobre sustancias químicas: las legislaciones sobre la mesa fueron el Reglamento sobre Productos Cosméticos y el Reglamento sobre Clasificación, Etiquetado y Envasado de Sustancias Químicas (CLP).

Allí presentó la siguientes propuestas de «simplificación»:

  • permitir en cosméticos y productos de cuidado personal la presencia de sustancias cancerígenas conocidas con mayor facilidad y
  • eliminar la actualización prevista del CLP para que el etiquetado de los productos sea más legible para consumidores y trabajadores.

Cancerígenos en cosméticos

Actualmente, el Reglamento sobre Productos Cosméticos prohíbe el uso de sustancias clasificadas como cancerígenas. Las exenciones, o situaciones en las que sí se permiten cancerígenos, solo se pueden conceder en condiciones estrictamente definidas y limitadas.

La propuesta presentada facilitaría a la industria de cosméticos el uso de sustancias cancerígenas, mutagénicas y reprotóxicas, conocidas como CMR, en sus productos.

El ámbito de aplicación de la propuesta incluye muchos productos cosméticos de uso diario, como pasta de dientes, enjuague bucal, desodorante y protector solar.

Además, ha sugerido que estas sustancias tan nocivas solo se prohíban si se clasifican como peligrosas por exposición cutánea, pero no cuando se sepa que son nocivas por ingestión o inhalación. Así que deja vía libre a la presencia de cancerígenos en productos que se pueden ingerir como la pasta de dientes y el enjuague bucal.

Permitir el uso de cancerígenos es inaceptable y provocaría una exposición innecesaria de infancia y personas adultas a CMR conocidos.

También más disruptores endocrinos

Algunas sustancias químicas con propiedades cancerígenas también son disruptores endocrinos conocidos, que afectan, entre otros muchos efectos, al receptor de estrógeno y contribuyen al desarrollo del cáncer de mama, de tiroides, de próstata y testicular.

Los efectos de estas sustancias químicas son más preocupantes en etapas clave del desarrollo: el embarazo, la infancia y la adolescencia.

Entre los contaminantes hormonales más habituales en cosméticos se encuentran los protectores solares, los parabenos o los ftalatos, detectados en los cuerpos de niños y niñas que usan productos de higiene de cosmética ‘industrial’.

cosméticos

Peor etiquetado

La Comisión también presentó propuestas para eliminar los nuevos requisitos de etiquetado de la normativa CLP, con lo que podría acabar con una reforma muy necesaria que pretendía poner fin a etiquetas de tamaño diminuto de fuente e interlineado para facilitar la lectura de las etiquetas de cosméticos.

Si no se modifican estas propuestas, consumidores y trabajadores seguirán sin tener información accesible sobre las sustancias químicas presentes en los productos cosméticos y qué peligros pueden suponer.

Cambio de rumbo de la unión Europea

La Unión Europea, hasta ahora, contaba con una de las legislaciones sobre sustancias químicas más avanzada del mundo en materia de protección de la salud. Estas propuestas son un retroceso.

Las y los consumidores deberían poder confiar plenamente en que la legislación sobre cosméticos les protege y no tener que hacerse expertos en etiquetado y en código de sustancias cosméticas.

Las negociaciones aún no han finalizado. Por eso, 270 organizaciones de la sociedad civil, sindicatos, grupos de consumidores, organizaciones de agricultores, grupos de derechos civiles y organizaciones de salud y medio ambiente, entre ellas Ecologistas en Acción instan al Presidente de la Comisión Europea a defender las normas que protegen la salud, la naturaleza, el clima y le advierten sobre los riesgos de una simplificación errónea.

Toda la legislación de la UE sobre sustancias químicas debe ajustarse a los objetivos del Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer.

Artículos relacionados