Un estudio demuestra que comer alimentos cultivados sin pesticidas durante sólo una semana reduce en un 95% la cantidad de estos tóxicos en la orina. Hacer accesibles alimentos limpios a toda la población es una medida de salud pública.
Reducción del 95% de plaguicidas
Un estudio de las universidades de Berkeley, San Francisco, el Instituto Commonweal y Friends of the Earth, publicado en abril de 2019, compara los niveles de pesticidas en la orina de cuatro familias estadounidenses antes y después de comer únicamente alimentos producidos sin pesticidas.
Aunque con un número reducido de muestras, los resultados de la investigación no dejan lugar a la duda: en sólo una semana de dieta sin pesticidas, la cantidad de estos tóxicos en el cuerpo desciende en un 95%.
En sólo una semana de dieta sin pesticidas, la cantidad de estos tóxicos en el cuerpo desciende en un 95%
Resultados del estudio
El primer resultado de la investigación, que sorprendió a todas las personas participantes, fue saber que todas ellas tenían en su cuerpo pesticidas asociados con cánceres, autismo, problemas de aprendizaje, infertilidad, Parkinson y trastornos hormonales.
Todas las personas participantes tenían en su cuerpo pesticidas asociados con cánceres, autismo, problemas de aprendizaje, infertilidad, Parkinson y trastornos hormonales
También les sorprendió conocer que la gran variedad de pesticidas detectados en sus cuerpos procedían de lo que comían en su dieta habitual.
En la primera muestra de orina, tomada al principio del estudio, se detectaron plaguicidas organofosforados, piretroides y neonicotinoides. También se detectaron plaguicidas disruptores endocrinos, capaces de afectar al sistema hormonal de los seres humanos y de los animales.
Pero con sólo una semana comiendo productos ecológicos, la gran mayoría de los pesticidas (el 95%) habían desaparecido de la orina de las personas participantes (lo que indica una menor contaminación de sus cuerpos).
Plaguicidas en alimentos en España
En España, el 50% de las frutas y hortalizas tienen residuos de pesticidas, como demostró el informe «Directo a tus hormonas» de Ecologistas en Acción, tras analizar los datos del Ministerio de Sanidad (AECOSAN).
El pesticida más habitual en los alimentos españoles es el insecticida organofosforado clorpirifós, un disruptor endocrino relacionado con problemas en el desarrollo del cerebro infantil. Eliminar este pesticida de la dieta durante una semana reduce significativamente su presencia en la orina.
La comida saludable es un derecho
Ninguna persona debe estar expuesta a pesticidas tóxicos en los alimentos que consume. Tampoco ningún agricultor o agricultora debería tener que sacrificar su salud o la salud de su familia para cultivar los alimentos.
Además, cada vez más estudios muestran que los alimentos ecológicos son más ricos en nutrientes que los cultivos convencionales intensivos.
Las administraciones públicas tienen la obligación que desarrollar políticas que hagan que los alimentos nutritivos y sin venenos sean accesibles para toda la población.
Los alimentos sin plaguicidas son un derecho de todas las personas; no pueden seguir siendo un privilegio de una élite.