Ciertas cremas corporales de marcas conocidas contienen disruptores endocrinos y alérgenos que pueden afectar a la salud, según un nuevo estudio de la organización de consumidores danesa KEMI.
Tóxicos en contacto con tu piel
Vigila que las sustancias que pones sobre tu piel sean saludables.
Muchas personas utilizan a diario cremas corporales que permanecen durante horas sobre su piel. A través de la piel, los disruptores endocrinos y alérgenos que puedan contener esos productos pasan al torrente sanguíneo.
La exposición a contaminantes hormonales se relaciona con efectos adversos en la salud. Quizá el efecto más conocido sea el aumento de las tasas de infertilidad (el número de espermatoziodes ha descendido un 60% en los últimos 40 años). Pero la comunidad científica apunta a otros efectos, como el incremento de la diabetes tipo 2 o de tumores en órganos relacionados con las hormonas, como el cáncer de mama, testículos, próstata y tiroides.
También se relaciona la exposición a contaminantes hormonales con el adelanto en la edad de la primera regla en adolescentes, con una mayor tendencia a la obesidad y con malformaciones de nacimiento en los órganos reproductivos, entre otros efectos.
La exposición a contaminantes hormonales se produce a muy bajas dosis pero procede de múltiples fuentes cotidianas, como los cosméticos.
Por esta razón son bienvenidos estudios de organizaciones como KEMI, que analizan la exposición en productos cosméticos de marcas conocidas.
El último estudio analiza los ingredientes de 54 marcas de lociones corporales, algunas muy conocidas. Los resultados del estudio son los siguientes:
- 8 cremas contienen disruptores endocrinos como parabenos, BHT y ciclopentaxiloxano.
- 24 productos obtienen una buena puntuación ya que no contienen sustancias problemáticas.
- 22 cremas contienen perfumes y alérgenos que pueden dañar al medio ambiente.
8 tienen cremas corporales contienen disruptores endocrinos como parabenos, BHT y ciclopentaxiloxano.
Cremas corporales a evitar
Además de disruptores endocrinos, estas 8 cremas contienen conservantes alérgenos (dmdm hidantoína y diazolidinil urea) y fragancias que pueden causar alergias como el hydroxyisohexyl 3–cyclohexene carboxaldehyde, un perfume que se prohibirá a partir de 2021 (pero aún sigue en las tiendas).
Las siguientes cremas han obtenido la peor puntuación (C) por contener disruptores endocrinos y alérgenos:
La crema Dove contiene disruptores endocrinos como ciclopentasiloxano, methylparaben y propylparaben.
El ciclopentasiloxano también es problemático para el medio ambiente.
Perfume alfa-isometil ionona, alcohol bencílico, citronelol, cumarina, limoneno y linalool, que pueden causar alergias.
Té verde de Elisabeth Arden contiene los disruptores endocrinos cyclopentasiloxane, BHT, Methylparaben y Propylparaben.
También contiene el perfume alergénico hidroxiisohexil 3-ciclohexeno carboxaldehído, prohibido en cosméticos a partir de 2021 y las fragancias Citral, Citronellol, Eugenol, Geraniol, Hydroxycitronellal, Isoeugenol, Limonene y Linalool, que pueden causar alergias.
El ciclopentasiloxano también causa daños en el medio ambiente.
La crema The Body Shop Mango contiene los disruptores endocrinos ciclopentasiloxano, Methylparaben y Propylparaben.
Contiene perfumes alérgenos como alcohol bencílico, y disodium EDTA, con impacto ambiental.
El ciclopentasiloxano también es peligroso para el medioambiente.
Dermal V10 mantequilla corporal de mango contiene parabenos como Methylparaben, conservante alérgeno dmdm hidantoína.
Perfumes, como la fragancia Linalool y Butylphenyl methylpropional, que pueden ser alérgicos.
Y EDTA, que puede dañar el medio ambiente.
Lancôme Nutrix royal cuerpo contiene parabenos sospechosos de ser disruptores endocrinos como el etilparaben y metilparabeno.
Perfumes que pueden causar alergias como el Hydroxycitronellal, Limonene, Linalool, Alcohol bencílico, Alpha isomethyl ionone, Geraniol y Citronellol.
La lima y el dinatrio EDTA pueden ser problemáticos desde el punto de vista ambiental.
La crema hidratante Clarins contiene el disruptor endocrino BHT.
También perfumes que pueden causar alergias como el limoneno, salicilato de bencilo, linalol, butilfenilo Methylpropional, cinnamal hexilo, citronelol, eugenol y citral, así como el extracto de la planta Citrus aurantium.
Contiene además disodium EDTA y limoneno que pueden dañar el medio ambiente.
Vaseline Cuidados intensivos contiene parabenos como metilparabeno y propilparabeno, sospechosos de ser disruptores endocrinos.
Perfumes que pueden causar alergias como las sustancias isometil alfa-ionona, cinnamal de amilo, alcohol de bencilo, butilfenilo Methylpropional, citronelol, cumarina, geraniol, cinnamal hexilo, limoneno, linalol.
Limonene y Dinodium EDTA, que pueden ser problemáticos para el medio ambiente.
Cremas que dañan al medio ambiente
22 de las 54 lociones corporales estudiadas pueden generar daños al medio ambiente una vez llegan al entorno, junto con las aguas residuales o directamente, al bañarnos en el mar.
Entre las marcas más conocidas de uso en España que deberíamos evitar por causar daños al medio ambiente, se encuentran Nivea Creme, la leche corporal Biotherm o la crema de aceite de Garnier. (calificadas con la letra «B» en el estudio)
La crema Nivea contiene cal y el benzoato de bencilo que pueden dañar el medio ambiente. Además contiene perfumes que pueden causar alergias como Lime, Geraniol, Hydroxycitronellal, Linalool, Citronellol, bencilbenzoato y alcohol de cinamilo.
Opciones saludables
Hay otras opciones de cremas de cuerpo sin sustancias que dañan a la salud humana y al medio ambiente.
Estos son algunos ejemplos de venta en España. Para ver todas la opciones saludables, se puede revisar el estudio en la página de KEMI en este enlace, en donde aparecen con la calificación «A».
Para elegir cosméticos saludables, una norma sencilla de recordar es optar por cosmética natural sin perfumes. Así se evitan fragancias que pueden causar alergias y conservantes derivados del petróleo que dañen al sistema hormonal.
Como siempre, estos consejos son especialmente importantes durante la infancia, la adolescencia y el embarazo, etapas en las que las alteraciones hormonales cobran una especial relevancia.
Estos consejos no implican que la auténtica responsabilidad de que los productos de consumo no tengan tóxicos es de las autoridades.