Compartimos un artículo reciente de eldiario.es que habla sobre el BPA y otros disruptores endocrinos (EDC por sus siglas en inglés).
Partiendo de la base de que es buena noticia que los medios de comunicación dediquen un espacio a los contaminantes hormonales, queremos aclarar un par de ideas del artículo con las que no estamos de acuerdo.
Artículo de eldiario.es Evita los disruptores endocrinos: BPA
Primera aclaración: EDCs y Europa
El artículo expone que «Aunque muchos de estos compuestos están prohibidos o muy regulados»
En absoluto muchos de estos compuestos están prohibidos o muy regulados. De hecho, sólo unos pocos de las más de 1.500 sustancias con capacidad de alterar el sistema hormonal están reguladas y prohibidas.
La prohibición habría podido llevarse a cabo si Europa hubiese aceptado unos criterios de regulación de disruptores endocrinos científicos. En lugar de eso, La Comisión ha propuesto unos criterios que son insuficientes para eliminar estas sustancias de nuestros alimentos y de nuestro entorno.
Un ejemplo de lo inútil de estos criterios es que no consideran disruptor endocrino a un plaguicida creado específicamente para matar a un organismo a través de su sistema endocrino.
Segunda aclaración: EDCs y alimentos
Tampoco es cierta la afirmación de que los disruptores endocrinos no llegan a entrar en contacto con tu comida.
El informe «DIrecto a tus hormonas» de Ecologistas en Acción encontró residuos de 33 plaguicidas disruptores endocrinos en los alimentos que se vendieron en España en el año 2014. En el año 2015 el número de plaguicidas detectados fue aún mayor, de 38.
Recordamos que cualquier cantidad de contaminante hormonal representa un peligro que no tenemos por qué aceptar como sociedad. La única opción segura es evitar la presencia de estos tóxicos en nuestro entorno.
A pesar de no estar de acuerdo en estos puntos, es una gran noticia que estos tóxicos se cuelen en los medios de comunicación, así que ¡gracias!