Los niños españoles tienen las concentraciones más elevadas de Europa de los tóxicos ftalatos, según muestra el proyecto europeo DEMOCOPHES, que ha monitorizado la concentración de estos químicos en muestras de pelo y orina de madres e hijos de 17 países europeos.
Los ftalatos son contaminantes hormonales, es decir, afectan a nuestro sistema hormonal, interfiriendo su funcionamiento. Y se encuentran a nuestro alrededor. Sólo en Europa se utilizan al año miles de toneladas para dar flexibilidad a plásticos, como los de botellas, juguetes infantiles o envases alimentarios. También son ingredientes en productos de higiene personal, como jabones, cremas, perfumes… o en productos de limpieza. En general, cualquier producto con fragancia tiene ftalatos, ya que se utilizan para fijar y hacer que perduren estas fragancias.
La exposición a ftalatos se asocia a cambios en sistema hormonal que pueden causar disminución de la fertilidad, partos prematuros o la aparición de defectos en órganos genitales, entre otros.
Según los resultados del proyecto DEMOCOPHES presentados en la IX Conferencia Nacional de Disruptores Endocrinos, los niños españoles tienen niveles de ftalatos superiores a los de sus madres, debido a la exposición durante el embarazo. Y tanto niños como madres españoles tienen los niveles más altos que la media de Europa. Un dato que ha llamado la atención de los investigadores es que los niveles de un metabolito de ftalato, el MEP (monoetil ftalato) en niños españoles es seis veces más alto que la media europea. Como se ve en la tabla inferior, 181,9microg/litro de MEP en niños españoles frente a 34,4microg/litro de media en niños europeos.
Los investigadores de DEMOCOPHES creen que estos elevadísimos niveles de MEP en España se relacionan con el uso de productos de higiene y limpieza. De hecho, el MEP es un metabolito del DEP (Dietilftalato), que es la sustancia química utilizado para fijar los perfumes de colonias, jabones o cremas (Las fragancias son mezclas que pueden tener hasta un 50% de DEP y suponen el 2% de la composición de los productos cosméticos).
Y los ftalatos no se encuentran sólo en las fragancias de productos de higiene, sino también en los productos de limpieza, como demuestra el estudio llevado a cabo en España, en el marco del proyecto Infancia y Medio Ambiente (INMA). Este estudio relaciona la presencia de ftalatos en la orina de mujeres embarazadas con un mayor uso de productos de limpieza, como lejía, amoniaco, limpiacristales o desengrasantes.
Como consumidores, podemos evitar o reducir la exposición a estos tóxicos comprando productos de higiene y cosmética que no tengan entre sus ingredientes DEP, DEHP (dietil hexil ftalato), DINP (di-isononil ftalato), DIDP (di-iso-decil ftalato), DMP (dimetil ftalato), etc. Más fácil es comprar directamente productos naturales sin sustancias tóxicas, sin fragancias o con fragancias 100% naturales. Muchos de estos productos están certificados con sellos como Ecocert, «Certified natural cosmetics«, entre otros.