Debido a contaminación global de plásticos, se puede afirmar que tenemos “plástico en vena”.
Plástico en venas y en arterias
Fuente: BreezyScroll
En 1990 el grupo musical Radio Futura cantaba «dicen que tienes veneno en la piel y es que estás hecha de plástico fino».
Lo que no era más que un estribillo, 22 años después (en 2022) se escucha como la premonición de una intoxicación global.
Los plásticos y sus derivados diminutos, los micro y nanoplásticos han colonizado lugares que la humanidad todavía sueña con pisar.
El cangrejo plástico
Un sorprendente y lamentable ejemplo es el cangrejo de nombre revelador, “Eurythemes plasticus”, habitante de la fosa de las Marianas.
El cangrejo vive tranquilamente en oscuridad y a más de 7.000 metros de profundidad, en lo que suponemos una vida plácida, alimentándose de animales muertos y plásticos.
Fuente: La Vanguardia.com
Su descubridora, la bióloga marina Johanna Weston, encontró un trozo de PET (tereftalato de polietileno) en su intestino, ese plástico tan utilizado en botellas, entre otros muchos usos.
Plástico a tutiplen: ¿De la Fosa de las Marinas a la Luna?
Al ritmo de las publicaciones que describen la presencia de plásticos en lugares inhóspitos, parece posible que —en caso de que se vuelva a pisar la Luna— se declare que:
“es un reiterado pequeño paso para la humanidad y un gran paso para la industria del plástico por colonizar nuestro satélite con sus productos«.
La industria del plástico no deja de crecer
La industria del plástico no deja de crecer. Así entre 1950 y 2015 se estima se produjeron 8.300 millones de toneladas de plástico
Se preve que el ritmo aumente de los 400 millones de toneladas actuales a los 550 millones para 2030.
Fuente: NDLA
Plástico en vena: de contaminar el medio ambiente a contaminar nuestro cuerpos
La ubicuidad del plástico y sus residuos no sólo es exterior también es interior. Muchos son los estudios que han detectado plástico en seres vivos.
Un reciente estudios realizado por la Universidad de Vrije de Ámsterdam ha encontrado por primera vez plástico en el flujo sanguíneo de hombres y mujeres.
Fuente: storyblock.com
¿Bisfenoles, ftalatos, miles de sustancias tóxicas y ese duda de su toxicidad?
Y mientras, sigue el debate sobre el riesgo o la inocuidad de estos fragmentos de plástico en el interior de los seres vivos.
Un debate absurdo
Un debate absurdo porque obvia que estos plásticos vienen acompañados de cientos de sustancias plastificantes como bisfenoles, ftalatos, o PFAS, de las que han un consenso sobre su peligrosidad, entre otros motivos por ser disruptores endocrinos.
Cada segundo de este debate es un tiempo perdido a la imprescindible toma inmediata de medidas globales para reducir la exposición de esta intoxicación de escala planetaria.
La nueva Ley de residuos es una buena noticia
Por todo esto, son muy necesarias las medidas de prohibición del bisfenol A y de ftalatos en envases y de la adición intencionada de microplásticos en bienes de consumos contenidas en la nueva Ley de residuos y suelos contaminados.
Todos y todas debemos apoyar con fuerza estas medidas, pero necesitamos más para evitar que nuestra vida y legado sean de plástico nada fino.