Los microplásticos están contaminando las frutas y verduras que comemos, incluidas las manzanas, las zanahorias y lechugas. Según un estudio publicado en la revista Environmental Research, las plantas absorben los microplásticos por las raíces hasta llegar a los frutos. Esta evidencia significa que podría tener un impacto negativo en la salud humana.
Los microplásticos son un problema medioambiental y de salud de primer orden. Hasta ahora, existía evidencia de la presencia de esas sustancias contaminantes en el aire, el suelo o el medio marino. Incluso en alimentos como pollo, pescado enlatado o mariscos. Sin embargo, no había preocupación científica acerca de la presencia de microplásticos en frutas y verduras. Un estudio publicado en la revista Environmental Research termina con esta esta creencia y nos pone en alerta.
Según el estudio, se han descubierto microplásticos en manzanas, zanahorias, peras, brócoli y lechuga. También los tubérculos, incluidos los rábanos, los nabos y las chirivías, podrían estar contaminados con estas sustancias tóxicas. Se cree que los diminutos compuestos fueron absorbidos por las raíces de las plantas con agua y luego viajaron por el tallo hasta las hojas y, cuando fue posible, las frutas.
Con estos resultados, realizados sobre seis frutas o verduras de cada tipo en seis lugares, tiendas o supermercados diferentes de Catania (Italia), se termina con la idea de que los microplásticos son demasiado grandes para pasar por los poros de las raíces. Lo que durante décadas se pensó como imposible ahora parece una evidencia que amenaza nuestra salud.
Frutas con plásticos (dentro)
En el estudio se cogieron las seis frutas o verduras de cada tipo y se limpiaron y pelaron, excepto el brócoli y la lechuga. A continuación se colocaron en una licuadora y se mezclaron para juntarlos. Luego la mezcla se deshidrató y analizó con un microscopio electrónico para identificar los microplásticos.
Los microplásticos más grandes (2,52 um) se identificaron en las lechugas, mientras que los más pequeños (1,51 um) se encontraron en las zanahorias. Este listado resume los resultados obtenidos:
- Manzanas (M. domestica). Se encontraron hasta 195.500 micro y nanopartículas plásticas.
- Peras (P. communis). Se encontraron 189.550 microplásticos y nanoplásticos.
- Brócoli (B. oleracea italica). Se encontraron 126,150 micro y nanopartículas plásticas.
- Lechuga (L. sativa). Se encontraron 50.550 micro y nanopartículas plásticas.
- Zanahorias (D. carota). Se encontraron 101,950 micro y nanopartículas plásticas.
Las autoras y autores del estudio enfatizan: «Con base en los resultados obtenidos, es urgente realizar estudios toxicológicos y epidemiológicos para investigar los posibles efectos de los microplásticos en la salud humana».
Neumáticos, cosméticos, productos agrícolas, o ropas sintéticas son algunas de las principales vías de entrada de los microplásticos a todo lo que nos rodea (aire, agua, tierra y alimentos). Por ello, desde Ecologistas en Acción seguimos insistiendo para que, tanto los microplásticos, como su expresión más invisibles (los nanoplásticos), sean prohibidos. Todas las administraciones públicas locales, estatales y europea tienen el deber de proteger nuestra salud y la del medioambiente.
Enlace al estudio sobre microplásticos en frutas y verduras: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0013935120305703
Esta información ha sido elaborada a partir de la traducción de este artículo publicado en Mail Online.