Générations Futures, socio de Ecologistas en Acción en la campaña contra los contaminantes hormonales EDC-Free, denuncia con su última investigación la presencia de pesticidas en las lechugas de venta en supermercados franceses.
La investigación
Génération Futures, ha analizado una muestra de 31 ensaladas (lechuga, rúcula, etc.) en busca de sustancias químicas tóxicas. Su investigación ha desvelado que estos vegetales se encuentran entre los más contaminados por residuos de pesticidas y que muchos de estos pesticidas tienen, además, capacidad disruptora del sistema hormonal.
Los resultados muestran que las ensaladas analizadas tienen una media de casi 4 residuos de pesticidas cada una, de los cuales 2 son contaminantes hormonales (EDCs). El 80.65% tienen al menos un pesticida y el 67,74% tienen un pesticida que además es sospechoso de ser disruptor endocrino. De cada 10 sustancias tóxicas que se han encontrado con más frecuencia, 7 son sospechosas de ser contaminantes hormonales (disruptores endocrinos, EDC).
Pero el problema es mayor aún. Las ensaladas testadas no sólo contienen sustancias sospechosas de ser contaminantes hormonales, sino que en un 16,13% de las muestras se han encontrado una o más sustancias prohibidas por la legislación de pesticidas europea.
Con los resultados de esta investigación Génération Futures quiere mostrar la necesidad urgente de implementar la regulación Europea de Plaguicidas del 2009 y de desarrollar la regulación de los disruptores endocrinos.
Según François Veillerette, portavoz de Generations Futures:
«Estamos avisando a nuestros dirigentes de la necesidad de tomar medidas duras e inmediatas para reducir la exposición de la población a los pesticidas, especialmente a aquellos que son sospechosos de ser disruptores endocrinos. Esperamos que fuercen a Europa a poner en marcha las decisiones tomadas por la Regulación Europea 1107/2009 (de plaguicidas), que prohíbe poner en el mercado disruptores endocrinos.»
Consecuencias
Si eliminar tóxicos de cualquier alimento es importante, es más importante aún eliminar contaminantes hormonales de alimentos sanos que se recomiendan a mujeres embarazadas y niños, ya que el momento de la exposición es decisivo. Los efectos de bajas dosis de EDCs son distintos sobre el embrión, el feto, el recién nacido o el adulto. Si los EDCs actúan en los primeros estadios de la vida, caracterizados por una rápida diferenciación celular y generación de órganos, pueden producir lesiones irreversibles.
Comer ensaladas y vegetales es sano y debemos seguir haciéndolo. Siempre que se pueda, es mejor comprar productos vegetales de agricultura ecológica. Pero en el caso de mujeres embarazadas, niños pequeños o enfermos, merece la pena hacer un esfuerzo extra en comer vegetales cultivados sin pesticidas ni fertilizantes químicos. Y cuando consuma fruta y verdura de cultivo no ecológico, se recomienda lavar y pelar los productos antes de consumirlos.